Hija natural de la criolla Isabel Ramírez Santillana y del capitán español Pedro Manuel de Asbaje y Vargas, Juana Inés de Asbaje y Ramírez nace el 12 de noviembre de 1648 en San Miguel Neplanta; y muere víctima de la peste, el 17 de abril de 1965 en el convento de San Jerónimo. Junto a su contemporáneo Carlos de Sigüenza y Góngora, Sor Juana es quizá la figura más descollante de la literatura y del barroco de la llamada Nueva España durante la segunda mitad del siglo XVII. Observadora infatigable de las leyes naturales en todos los niveles, desde su cotidianidad (freír huevos, guisar, hacer unas vainicas), y preocupada por la máxima abstracción científica a la que le era dado llegar en su época –las metáforas de El Sueño- , Sor Juana interioriza admirablemente las reglas más estrictas y definitivas de su sociedad, acepta y amenaza el orden establecido para la mujer, con la misma tranquilidad con que asimila a la perfección las métricas, los ritmos, las retóricas, en fin, el estilo de su tiempo. Dentro de esas normas se mueve con la cautela de quien sabe que está en el filo de la navaja, y cuya existencia depende de una estricta vigilancia sobre el hilo que hilvana su vida y la define. Su fama fue creciendo a medida que sus proezas intelectuales provocaban el “pasmo” en la corte virreinal, primer espacio “cultural” en el que se desenvuelve su vida y su obra. Desde muy joven, como doncella de honor de la Marquesa de Mancera, es causa de atracción general. Ese joven prodigio comienza su carrera con un examen público, idéntico en su teatralidad grandilocuente a los frecuentes y fastuosos espectáculos característicos de la época barroca con que se deslumbraba—espantaba- a los espectadores y se afirmaba el poderío de la monarquía. Mientras vivió, su fama alcanzó los límites del mundo hispánico y perduró todavía muchos años, como puede comprobarse en las sucesivas ediciones, las reimpresiones numerosas y la recepción de sus obras. De Sor Juana Inés de la Cruz, la Biblioteca Ayacucho ha publicado Obra selecta, volúmenes 197 y 198 de la Colección Clásica.
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