En 1997, luego de la verificación de sus datos por un grupo de científicos, reconociéndolo como el sitio más antiguo de América habitado por seres humanos que se haya podido verificar hasta el presente, el descubrimiento puso fin al Consenso de Clovis que postulaba el poblamiento tardío del continente americano y dio inicio a nuevas ideas como la del poblamiento temprano.
1. El yacimientoLa casualidad permitió que este sitio se mantuviera perfectamente bien conservado, incluyendo carne y cuero de mastodonte, cuerdas, estacas, maderas, gran cantidad de restos de alimentos y plantas y hasta las pisadas de un pie pequeño. Esta conservación se produjo por el ascenso del nivel del agua del pequeño arroyo Chinchihuapi, lo que transformó el lecho del arroyo y el piso del sitio en el fondo de un pantano. El depósito de sedimentos pobres en oxígeno y la buena turba cubrieron el campamento de Monte Verde permitiendo que se preservara perfectamente lo que habitualmente no se conserva en un sitio arqueológico. La evolución de este pantano en presencia de una gran cantidad de hierro proveniente de los volcanes andinos, originó sobre esta turba un segundo sello formado por óxido de hierro, duro como una roca, pero más importante, impermeable al agua de las lluvias sureñas.
2. Descubrimiento
En la década de 1970 campesinos locales, específicamente pertenecientes a la familia Barría, cambiaron a pala y picota el curso del arroyo Chinchihuapi para facilitar el tránsito de sus yuntas de bueyes que tiraban carretas que transportaban largos troncos. Al año siguiente, la erosión causada por la modificación del arroyo dejó a la vista grandes huesos de mastodontes, que los habitantes locales no supieron reconocer, pero que los Barría guardaron por curiosidad. En 1976, por azar, un estudiante de la Universidad Austral de Chile, Luis Werner, de paso por el lugar recibió los huesos de la familia Barría, y este se los entregó a los profesores Mauricio van de Maele y Troncoso, quienes visitaron Monte Verde e incrementaron la colección de huesos recogiendo los que estaban a la vista en los estratos del Chinchihuapi.
3. Investigación
Las investigaciones en el sitio Monte Verde han identificado dos componentes: Monte Verde I (MV-I) y Monte Verde II (MV-II). Los análisis de Carbono-14 han indicado que MV-I podría tener aproximadamente 33,000 años de antigüedad y MV-II entre 12,800-12,300 años.
Monte Verde tenía instrumentos líticos, óseos, una rica colección de madera y muchísimos restos de plantas. Entre los restos de madera había vestigios de la arquitectura más temprana descubierta en América. Las condiciones de conservación del sitio permitieron recuperar una vivienda de gran tamaño con forma de carpa o toldo. Su estructura, formada por ramas de árboles y cubierta con cueros de animales, es muy parecida a las viviendas de los grupos tehuelches de la Patagonia y semejante a las chozas de los kawésqar de los canales patagónicos. Esta arquitectura sugiere la existencia de una comunidad en que existía ya la división del trabajo bien definida.
La exploración comenzó en 1977 cuando el grupo de investigadores liderado por el arquéologo Tom Dillehay excavó un pozo de exploración con 4 de sus alumnos del Bachillerato de la Universidad Austral de Chile. Inmediatamente Dillehay se dio cuenta que estaba frente a un asentamiento completamente diferente a los sitios de la cultura Clovis; este sitio representaba un lugar de campamento de recolectores y cazadores semisedentario a sedentario. Posteriormente se pudo colegir que los habitantes de Monte Verde poseían conocimientos de la estacionalidad y de las fluctuaciones ambientales y que tenían interacción social con otros grupos.
En 1979 gran parte de la cultura Monte Verde y su historia natural ya había sido comprendida y fue presentada en el XII Congreso Nacional de Arqueología en el Campus Teja, de la Universidad Austral, en Valdivia.
Esta datación fue confirmada por un panel internacional de científicos que visitó el sitio en 1997, siendo desde ese año reconocido por la mayor parte de la comunidad científica, como el sitio más antiguo habitado por seres humanos de América que se halla podido verificar hasta el presente.
Los descubrimientos de Monte Verde y otros yacimientos antropológicos de América como Piedra Museo (Argentina), Pedra Furada (Brasil), Topper (EE.UU.) han replanteado completamente la teoría predominante sobre el poblamiento de América, teoría del poblamiento tardío, fundada sobre la Cultura Clovis, que sostiene que el hombre ingresó al continente americano hace aproximada de 13,500 años, y han dado fundamento a una nueva teoría del poblamiento temprano de América, que ubica la fecha de ingreso entre 23.000 y 50.000 años adP, al mismo tiempo que modifica las teorías sobre las rutas de entrada y difusión por el continente.
Posteriormente en el 2007, Monte Verde sería relacionado con un nuevo yacimiento arqueológico conocido como Pilauco bajo, postulándose que ambos sitios serían complementarios; en el que Monte Verde sería un sitio habitacional, y Pilauco bajo un lugar de carroñeo. [1]
4. Artefactos encontrados
En el sitio Monte Verde II se recuperararon:
- 38 trozos de carne y cuero de animal.
- 11 especímenes de papa silvestre.
- 6 variedades de algas.
- 23 especies de plantas no locales.
- Más de 20.000 partes de plantas pertenecientes a 55 taxones locales.
- 380 elementos arquitéctónicos y herramientas hechos de madera, la mayor parte relacionada con la estructura de viviendas domésticas.
- Más de 650 líticos culturales.
- Decenas de huesos de mastodonte y otros animales.
- Varios fogones, braseros y hoyos en distintas áreas.
- Fragmentos de cordeles y de pedazos de piola hechos de juncos.
Estos artefactos forman una colección almacenada en el Museo Histórico y Antropológico Maurice van de Maele de la Universidad Austral de Chile en la ciudad de Valdivia, XIV Región de Los Ríos.
5. Bibliografía
- Dillehay, Tom D.; Cecilia Mañosa (2004). Monte Verde: un asentamiento humano del pleistoceno tardío en el sur de Chile (en español). Santiago de Chile: LOM ediciones. ISBN 956-282-659-7, OCLC 62113415.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario