La obra poco conocida de Alejandro de Humboldt, Cristóbal Colón y el descubrimiento de América (publicada por primera vez en francés entre 1836 y 1839), muestra su faceta de historiador. El libro impresiona debido al hecho de tener a un científico escribiendo sobre temas históricos. En su prólogo dice lo siguiente:
Las investigaciones históricas que en este momento publico son extracto de un trabajo al que he dedicado durante 30 años, y con la mayor predilección, todos los momentos libres de apremiantes tareas. Por haber visitado durante mis primeros viajes la parte
meridional de la isla de Cuba, las extremidades oriental y occidental de Tierra Firme y esas costas de Guayaquil y de la Puná, célebres en la historia de los primeros descubrimientos, la lectura de las obras que contienen las narraciones de los conquistadores ha tenido para mí especial atractivo, y las investigaciones hechas en
algunos archivos de América y en bibliotecas de diferentes partes de Europa me han facilitado el estudio de una rama descuidada de la literatura española.
Halagábame la esperanza de que una larga permanencia en las regiones menos visitadas del Nuevo
Mundo, el conocimiento local del clima, de las comarcas y de las costumbres, el hábito de determinar la posición astronómica de las localidades, de trazar el curso de los ríos y la dirección de las cordilleras, el mayor cuidado, en fin, para averiguar las diferentes
denominaciones que en la maravillosa variedad de sus idiomas dan los indígenas a los mismos puntos, me darían a conocer en los relatos de los primitivos viajeros algunas combinaciones de hechos que la sagacidad de los geógrafos e historiadores modernos de América no hubiese advertido...
Desde el principio el sabio lucha por separar la fantasía de los hechos verdaderos, para lo cual recurre a diversas disciplinas. Así, en el mismo prólogo, en ocasión de agradecerle a su colega el barón francés Charles Athanase Walckenaer (1771-1852) por permitirle el libre uso de su biblioteca, Humboldt expresa lo siguiente:
Entre las riquezas que contiene esta biblioteca, he tenido la dicha de averiguar con el Sr. Walckenaer, en la primavera del año 1832, durante mi último viaje a París, el autor y la fecha de un mapamundi que ha dado ocasión a observaciones interesantísimas.
Después, en el capítulo XXIX dedicado a las primeras islas que “descubrió” Colón, Humboldt vuelve a llamar la atención a:
… el Mapamundi de Juan de la Cosa de 1500, cuya grande importancia hemos descubierto Mr. Walckenaer y yo, en 1832, que aumenta el valor de las objeciones consignadas en la Vida de Cristóbal Colón por Washington Irving.
Y en la página 209 del mismo capítulo, Humboldt promete: “No anticiparé los amplios informes que he de dar de Juan de la Cosa al describir el mapamundi del célebre navegante…”
¿Por qué impresionó tanto a Humboldt “el Mapamundi de Juan de la Cosa de 1500” que estudió en la biblioteca de Walckenaer en la primavera de 1832?
¿Qué “observaciones interesantísimas” sobre el contenido y posible origen del mapa hicieron ambos polifacéticos sabios?
¿Qué consecuencias vislumbraron?
Este mapamundi es un artefacto cultural que fue producido por el ingenio y la laboriosidad de muchos seres humanos, con materiales y recursos tecnológicos de cierto periodo de la historia; y que ha sido intervenido por personas distintas a sus autores originales. Pero además, para agregarle a la confusión, se han elaborado copias del mapamundi en las cuales se ha deformado la información de manera grotesca.
Para poder caracterizarlo apropiadamente es necesario que un equipo multidisciplinario de especialistas, con recursos adecuados, se avoque a su estudio minucioso. Mientras tanto, valiéndonos de la imagen recibida del Museo Naval de España, en este capítulo trataremos de responder preguntas como las siguientes:
¿Qué pueblo o pueblos idearon y desarrollaron la tecnología que se utilizó en la elaboración del mapa? En este sentido, son importantes los instrumentos para levantar la información necesaria para delinear las costas; y en el mapa, la Rosa de los Vientos, base de su sistema de coordenadas.
¿Qué reino o imperio ordenó el trazado de este mapamundi?
¿Cuándo? Lástima que el colofón ha sido borrado.
¿Cuánto tiempo les tomaría a los antiguos cartógrafos levantar la información necesaria para dibujar esta obra monumental, patrimonio de la humanidad?
¿Cómo fue el transitar histórico de este mapa desde su confección hasta llegar al Museo Naval de España en Madrid?
¿Quiénes utilizaron este documento histórico?
¿Quiénes lo modificaron a su conveniencia?
¿Quiénes conociendo su “grande importancia” callaron su procedencia y trascendencia?
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